En el proyecto trabaja con 22 municipalidades priorizadas ubicadas en 4 provincias: Lima, Chiclayo, Lambayeque y Piura. De un total de 1874 municipalidades en el Perú, se dio prioridad a 22 de ellas en función de una serie de criterios como: la posibilidad de lograr una descentralización fiscal (municipalidades carentes de catastros o con catastros desactualizados, brecha de ingresos potencial considerable dentro de las principales ciudades), las zonas afectadas por la inundación de 2017 en las que se realizan actividades de reconstrucción, desarrollo o ampliación urbanos acelerados, entre otros criterios. El proyecto se centra solo en las zonas urbanas y no incluye las zonas periurbanas o rurales de las municipalidades.